El nivel de contaminación del lago San Roque ha llegado a límites insospechados.
Este mediodía, en Villa Carlos Paz, causó indignación entre los vecinos y estupor en los turistas, el triste espectáculo de un perro que salía de refrescarse en el espejo de agua, teñido de verde por las algas; un triste testimonio del deterioro ambiental del lago, ademas del olor nauseabundo y la mortandad de peces que se produce en plena temporada de la principal plaza turística de la provincia.
María Angela Mancuello, autora de la imagen, cuenta que «hoy al mediodía, en una recorrida por la Costanera observé que a algunas personas les llamaba la atención un perro y al acercarme me impresionó el color verde que lo cubría».
Mancuello, que ademas participa en la Coordinadora de Vecinos Autoconvocados por un Ambiente Sano (COVASA), indicó a Sala de Prensa Ambiental que «desde el año pasado, cuando afloró durante días el terrible cuadro hediondo de las aguas del Lago, venimos pidiendo desde COVASA que se les preste atención a las organizaciones ambientalistas y a la realidad que manifiesta el San Roque cada año, porque esto ataca al motor económico-turístico de Carlos Paz.
