Desde que asumió Martín Llaryora como gobernador de Córdoba, en diciembre de 2024, el gobierno provincial dejó de hacer públicos los datos de desmontes (legales e ilegales) en el territorio provincial.
Las últimas cifras oficiales publicadas a las que se puede acceder corresponden a diciembre de 2023. Es decir que, desde hace un año y medio, el gobierno provincial no informa sobre las estadísticas que permitirían conocer el estado de los ecosistemas provinciales. Hablamos de una información vital para establecer un diagnóstico correcto y encarar políticas ambientales reales para la preservación de los bosques nativos de la provincia. Se trata también, del derecho de la ciudadanía cordobesa a estar informada.
Esto significa que los cordobeses dejaron de conocer la cantidad de bosque nativo que se perdió en la geografía provincial desde el año 2024 hasta la fecha. Recordemos que desde hace más de 6 años el gobierno provincial decidió no dar a conocer las cifras de los desmontes legales, es decir, la cantidad de hectáreas que el área ambiental cordobesa autorizaba a desmontar por diferentes razones. Desde entonces, y hasta el último año del gobierno de Juan Schiaretti (2023), sólo se publicaron las cifras de los desmontes ilegales. Desde la asunción de Martín LLaryora no se publica ninguna cifra.
Según el último estudio científico elaborado por Marcelo Zak y Marcelo Cabidolo -doctores en Ciencias Biológicas- apenas el 2,28 por ciento de bosque nativo maduro sobrevivía hasta el año 2009 en la provincia de Córdoba: 1,63% de bosques nativos -en buen estado de conservación- en llanuras y el 0,65% en las sierras provinciales (Ver https://www.periodismoambiental.com.ar/el-calvario-de-los-bosques/).
MISTERIO DEVELADO
Sin embargo, según pudo establecer Sala de Prensa Ambiental a partir de datos oficiales comparativos extraídos de un organismo nacional que funciona desde el año 2018, Córdoba el año pasado (2024) perdió 27.799 hectáreas de bosques nativos, es decir 277,99 millones de metros cuadrados, o para hacerlo mas gráfico aún: 15.617 canchas de fútbol. ¿Las causas? Incendios y desmontes (en la práctica el fuego se ha transformado en la manera más económica, rápida, eficiente y anónima de desmontar).
El último registro público informado oficialmente por el gobierno cordobés es del año 2023 e indica que la superficie total afectada por el desmonte sin autorización (ilegales) fue de 4.012,24 hectáreas en zonas rojas y amarillas de bosques nativos. En el 2024 las zonas más castigadas por las pérdidas fueron las que poseen los bosques nativos en mejor estado de conservación en el norte y noroeste provincial.
A FALTA DE DATOS CORDOBESES, EL SAT-D
Desde el año 2018, el Estado Nacional tiene bajo su órbita el Sistema de Alerta Temprana de Deforestación que es uno de los componentes del Sistema Nacional de Monitoreo de Bosques Nativos de la República Argentina (SNMBN), junto con el Monitoreo de los Bosques Nativos, el Inventario Nacional de Bosques Nativos y la Estadística Forestal.
Más allá del gobierno de turno y los vaivenés políticos del país, el SNMBN provee información actualizada de los recursos forestales nativos del país y permite dar seguimiento a la implementación de la Ley N° 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos, colaborar con el cumplimiento de los convenios internacionales asumidos por el país en materia de Cambio Climático y brindar información a la sociedad sobre la importancia de los bosques nativos.
En este contexto, el SAT-D es una herramienta que monitorea la pérdida de bosque nativo de forma continua. El sistema procesa automáticamente cada quince (15) días, imágenes satelitales aplicando algoritmos de detección de cambios en el entorno de Google Earth Engine.
«Córdoba el año pasado (2024) perdió 27.799 hectáreas de bosque nativo, es decir 277,99 millones de m2, o para hacerlo mas gráfico aún: 15.617 canchas de fútbol»
El 100% de las alertas son luego validadas y procesadas en un entorno de Sistemas de Información Geográfica (SIG) para ser cruzadas con información secundaria relacionada (Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos y Planes aprobados por las provincias y cargados en el Registro Nacional de Planes). Finalmente, se envía a cada provincia un reporte con el detalle de las alertas y el requerimiento de información sobre la legalidad de cada evento de deforestación: si estaba autorizado o no, instrumento que autoriza el desmonte, número de expediente y medidas a tomar en caso de los eventos ilegales, entre otros datos.
LOS INCENDIOS SON DESMONTES ENCUBIERTOS
Según el informe anual del SAT-D, durante el 2024 provincias como San Juan registraron la pérdida de 1 hectárea, o Tierra del Fuego 2 hectáreas; en tanto establece que en Córdoba -desde el 1 de enero al 31 de diciembre de 2024- se registraron 223 alertas de deforestación que se tradujeron en 27.799 hectáreas forestales que ya no existen en el territorio provincial. De esa superficie, 20 mil estaban bajo la categoría roja (de muy alto valor de conservación) conformando el 75% de los bosques nativos eliminados.
El monitoreo del SAT-D además establece que de un total de 19 provincias, Córdoba se ubicó en el cuarto lugar de superficies perdidas a nivel nacional; y además ocupó un triste primer lugar en el podio de la categoría de bosques nativos con mayor valor de conservación.
Formosa se ubica en primer lugar, Santiago del Estero segundo y Chaco tercero con apenas 4 mil hectáreas más que Córdoba. En definitiva, el dato revelador quizás sea que Córdoba se ubicó el año pasado entre las 4 provincias con mayor pérdida forestal de la Argentina.
Por otro lado, la provincia que cuenta más superficies con alertas de bosque nativo vinculados a incendios forestales fue Formosa, seguida por Córdoba -con un pico del 16 al 30 Septiembre del 2024- afectando 26.055 hectáreas de 27.799, es decir el 93,7% del total.
En definitiva, Córdoba no hace públicos sus datos de pérdida de bosques nativos a pesar que el actual gobierno provincial tiene un Ministerio de Ambiente que contiene bajo su órbita una superestructura de 16 secretarías y subsecretarías cuyos funcionarios, funciones, logros y resultados los cordobeses estarían desconociendo.
Sin embargo, pese a la expansión burocrática del área ambiental provincial, desde que la ministra Victoria Flores asumió dejaron de hacerse públicas las cifras de los desmontes.
¿Las razones? Deberán explicarlas los funcionarios responsables del área, aunque tal vez sean los resultados de una gestión que no quiere mostrar la cantidad de bosques nativos que se eliminaron del territorio cordobés en el último año y medio.
¿Las razones? Tal vez estas cifras interfieran con un monólogo gubernamental orquestado con periodistas afines, o desde las redes sociales de un gobierno cordobés que se distrae de lo importante intentando mostrar un panorama mucho más digerible con un relato sustentable y circular.